El Comité de Derechos Humanos de la ONU ha iniciado una investigación contra el gobierno de Nicolás Maduro por presunto fraude electoral en las elecciones de julio en Venezuela. En respuesta a una denuncia presentada por un grupo de abogados, el Comité exigió que se conserven las actas de escrutinio y otros documentos clave relacionados con el proceso electoral.
Paulo Abrão, uno de los abogados responsables de la denuncia, confirmó que el Comité ha dictado medidas provisionales urgentes, ordenando al régimen venezolano que no destruya los materiales electorales. Este paso se toma mientras el Comité investiga las alegaciones de fraude masivo, falta de transparencia y restricciones al voto, especialmente para los ciudadanos en el extranjero.
La denuncia presentada por IHR Legal también señala la obstrucción al control ciudadano y la supresión del acceso a la justicia, acusaciones que se suman a las de fraude electoral y violaciones de derechos fundamentales. El Comité ha solicitado que el Estado venezolano preserve todos los documentos necesarios para garantizar una correcta auditoría del proceso electoral.
