Zohran Mamdani, un joven político de origen ugandés, ha estremecido el panorama electoral de Nueva York tras imponerse en las primarias demócratas a un peso pesado del partido, el exgobernador Andrew Cuomo. Con solo 33 años, Mamdani se perfila como el futuro alcalde de la ciudad más grande de Estados Unidos y el primero en ser musulmán y abiertamente socialista en ocupar ese cargo.
La votación oficial se conocerá el 1 de julio, cuando se publiquen los resultados del sistema de votación por orden de preferencia, pero Cuomo ya ha reconocido su derrota. Mamdani, actual asambleísta estatal por Queens y figura emergente del ala progresista del Partido Demócrata, se ganó el respaldo de líderes como Alexandria Ocasio-Cortez y Bernie Sanders con una plataforma centrada en la justicia social y la asequibilidad urbana.
Raíces diversas, propuestas radicales
Hijo del profesor universitario Mahmood Mamdani y de la cineasta Mira Nair, Mamdani nació en Uganda, creció en Sudáfrica y se mudó a Nueva York a los siete años. Estudió en la Escuela de Ciencias del Bronx y en Bowdoin College. Su trayectoria incluye activismo estudiantil, asesoría contra ejecuciones hipotecarias, y una huelga de hambre de 15 días en apoyo a los taxistas endeudados de la ciudad. Incluso incursionó en la música como rapero bajo el seudónimo “Mr. Cardamom”.
Su programa de gobierno propone congelar los alquileres, ofrecer transporte urbano gratuito, cuidado infantil universal y tiendas de alimentos subsidiadas. Aunque reconoce que aumentar los impuestos a los más ricos requiere aprobación estatal, ha prometido seguir presionando desde el Ayuntamiento. Su campaña ha recaudado 7 millones de dólares a través de miles de pequeños donantes.
Un candidato incómodo para el ala centrista

Su victoria ha generado preocupación entre sectores centristas del Partido Demócrata. El centro de estudios Third Way advirtió que su ascenso representa “un golpe devastador” en la lucha contra el trumpismo. Matt Bennett, vicepresidente del grupo, alertó que su nominación podría perjudicar al partido en general.
Cuomo, respaldado por figuras como Bill Clinton y Michael Bloomberg, enfocó su campaña en descalificar a Mamdani como un extremista inexperto. En contraste, el joven político destacó las diferencias de estilo de vida: vive en un apartamento en Queens, usa bicicleta y transporte público, y ha rechazado donaciones millonarias.
Postura frente a Israel y la controversia del antisemitismo
Mamdani ha sido criticado por su firme defensa de la causa palestina, a la que ha vinculado con su compromiso por los derechos humanos. Ha calificado al gobierno israelí de practicar un “genocidio” y defendió el uso de la consigna “globalizar la intifada”, lo que le valió condenas del Museo del Holocausto y de algunos demócratas. En respuesta, aseguró que su postura no atenta contra el pueblo judío y denunció campañas difamatorias que incluyen amenazas de muerte y material propagandístico con tintes racistas.
El contralor de la ciudad, Brad Lander, aliado circunstancial de Mamdani, reconoció la tensión del lenguaje usado, pero no retiró su apoyo. El candidato también denunció el uso de su imagen alterada en propaganda negativa promovida por PACs cercanos a Cuomo.
Críticas a Trump y el papel internacional de EE.UU.
Mamdani condenó duramente los recientes ataques ordenados por Donald Trump contra Irán, calificándolos como “un nuevo y oscuro capítulo” en la política exterior estadounidense. Atribuyó la agresión militar a una clase política que prefiere financiar guerras antes que erradicar la pobreza, una postura que reafirma su compromiso con una visión pacífica y socialmente justa.
Con esta victoria histórica, Mamdani no solo representa un cambio generacional y étnico en el liderazgo de Nueva York, sino también una ruptura con las élites tradicionales del Partido Demócrata. Resta esperar si en noviembre consolidará su victoria o si el establishment optará por respaldar al actual alcalde Eric Adams, quien se postula como independiente.