Nos complace ver que una de las primeras acciones del nuevo director general de la Dirección General de Desarrollo a la Comunidad (DGDC), Modesto Guzmán, ha sido visitar la parroquia San Francisco de Asís, en el sector La Nueva Barquita, Santo Domingo Este. Esta visita tuvo como propósito evaluar de primera mano las necesidades y proyectos en curso que requieren atención en dicha comunidad.
El enfoque práctico y comprometido de Modesto Guzmán es evidente. Al estar presente en el lugar de los hechos, no solo asistió a la misa ofrecida por el párroco Almánzar Alegría, sino que también escuchó directamente las inquietudes de los residentes, proponiendo soluciones concretas a los desafíos que enfrentan. Este tipo de gestión activa marca la diferencia en la relación entre las autoridades y las comunidades.
Como ha expresado el propio director general, estar en contacto directo con las comunidades no es solo necesario, es indispensable para comprender plenamente sus necesidades y trabajar de manera conjunta en la implementación de soluciones efectivas. La colaboración entre las autoridades y los ciudadanos es la piedra angular del desarrollo comunitario sostenible y del bienestar colectivo.
Es alentador ver que, cada vez más, nuestros funcionarios estén dejando atrás la comodidad de los escritorios para sumergirse en la realidad de nuestras comunidades. Esta cercanía es vital para fomentar un cambio verdadero y duradero. Saludamos este nuevo impulso en la DGDC, que refleja un aire renovado de compromiso y acción.
El ejemplo de Guzmán debe servir de inspiración para que otros directores y funcionarios sigan su camino, demostrando que la acción en el terreno es la clave para generar transformaciones significativas en nuestra sociedad. Apostamos por esta nueva etapa de la DGDC, que promete grandes avances en el desarrollo comunitario.