La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) condenó el martes las «numerosas agresiones, detenciones y amenazas» contra periodistas que cubren las protestas sociales, en distintas ciudades de Estados Unidos, desatadas tras la muerte hace una semana del ciudadano afroamericano George Floyd a manos de la policía.
El presidente de la SIP, Christopher Barnes, director de The Gleaner Company (Media) Limited, Kingston, Jamaica, expresó, a través de un comunicado de prensa, que «si bien los periodistas conocen los riesgos a los que se exponen durante la cobertura de protestas sociales, en la mayoría de los casos denunciados, la prensa debidamente identificada, se convirtió también en objetivo de la policía y manifestantes».
Roberto Rock, presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP y director de La Silla Rota, Ciudad de México, México, subrayó que «cuando se agrede a la prensa se afecta el derecho del público a recibir noticias» e instó a que se garantice la libertad de prensa.
La SIP enumeró en el texto diferentes incidentes, como el arresto en Minneapolis de un corresponsal de CNN, Omar Jiménez, mientras transmitía en vivo, así como la detención de dos miembros su equipo, y el disparo de una bala de goma que recibió la fotoperiodista independiente Linda Tirado, entre otros hechos que involucran a comunicadores de Reuters, MSNBC, CBS News, WAVE News, entre otros.
La SIP junto a otras 96 organizaciones de prensa y periodistas; medios y empresas periodísticas, y organizaciones no gubernamentales, firmaron una carta del Comité de Reporteros para la Libertad de Prensa (RCFP por sus siglas en inglés), enviada a la Policía y a autoridades estatales de Minnesota, reclamando por el maltrato a periodistas durante la cobertura de las protestas en Minneapolis.
El lunes, Stéphane Dujarric portavoz de la ONU manifestó la necesidad de investigar los ataques sufridos por varios periodistas que cubrían las manifestaciones.
Por su parte, el gobernador de Minnesota, Tim Walz, ofreció el viernes disculpas a la cadena CNN por el arresto de su equipo, a través de una rueda de prensa. Señaló, incluso, que la policía debió colocar una zona segura para los reporteros.
«Acepto la responsabilidad; no hay motivos para que algo así debiera ocurrir. Esto es una disculpa pública de que eso no debió haber ocurrido», señaló Walz.
Por contra, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, acusó el domingo, a través de su twitter, a los medios de comunicación, por «fomentar el odio y la anarquía».
«Los Medios de Comunicación Parciales están haciendo todo lo posible para fomentar el odio y la anarquía. ¡Así como todo el mundo entiende lo que están haciendo, que son NOTICIAS FALSAS y gente mala de verdad con una agenda enfermiza, podemos trabajar fácilmente más allá de ellos a través de la GRANDEZA!», escribió.
Cientos de manifestantes se reunieron el lunes, por cuarto día consecutivo, cerca de la Casa Blanca para protestar por la muerte de George Floyd.