En los últimos años, los Mets de Nueva York se han caracterizado por ser en los últimos años un equipo que tiene expectativas y objetivos muy altos, y por apuntar muy arriba cada temporada, pero por alguna u otra razón, siempre se quedan en la orilla. Pero quizá mucho de eso tenga que ver con la planeación deportiva que en la gerencia se ha hecho, y el caso de Jake Marisnick ejemplifica muchísimo lo que ha pasado éste año (y los últimos) en Queens.

Marisnick fue cambiado a los Mets de Nueva York en la temporada baja rumbo al 2020 desde los Astros, en donde los de la Gran Manzana dieron a cambio a dos prospectos de picheo, entre los que se encuentra Blake Taylor, quién tiene un futuro bastante promisorio al tener una efectividad de 2.41 en 18.2 entradas cómo relevista en 20 encuentros, además de un salvamento.

¿Que les ofreció Marisnick a cambio? Para empezar, el ex de los Astros llegó a Nueva York en el último año de su contrato en una temporada de sólo 60 juegos y se perdió la mayor parte de agosto debido a una lesión y no jugó su primer encuentro hasta el 2 de septiembre, con el manager Luis Rojas tomando la decisión de sólo alinearlo contra lanzadores zurdos.

Al final, Marisnick sólamente jugó 16 partidos para los Mets y ahora, según información de Anthony DiComo de se perderá lo que resta de la temporada por lesión y se convertirá en agente libre al finalizar el año. Seguramente no fue el mejor negocio para los Mets de Nueva York.