WASHINGTON, (AP) .— El director del FBI Christopher Wray ha ordenado una revisión interna sobre la posibilidad de conducta ilegal en la investigación a Michael Flynn, exasesor de seguridad nacional del gobierno del presidente Donald Trump, indicó el viernes la agencia.
En la valoración posterior a la acción se examinará si algún empleado incurrió en irregularidades durante el curso de la pesquisa, y se evaluará si es necesario hacer mejoras en las políticas y procedimientos del FBI.
Con su anuncio de la revisión, esa agencia federal de investigación —blanco frecuente de la ira de Trump— se está internando en un caso que los partidarios del presidente han enarbolado para apoyarlo, y lo está haciendo justo cuando el Departamento de Justicia rechaza las críticas de que su reciente decisión de desechar el caso contra Flynn fuese una acción con móviles políticos para cumplir una orden de Trump.
El anuncio se suma al escrutinio interno a una de las investigaciones emblemáticas del fiscal especial Robert Mueller sobre los vínculos entre Rusia y el equipo de campaña de Trump en 2016. Pone de relieve cómo un caso que parecía resuelto cuando Flynn se declaró culpable en 2017 ha dado pie a un debate prolongado y políticamente cargado sobre las tácticas del FBI durante la investigación a Flynn y en general sobre la pesquisa acerca de Rusia.
La revisión será encabezada por la División de Inspecciones del FBI, que realiza investigaciones internas a posibles conductas ilegales entre empleados de la agencia. Aunque la división carece de la autoridad para impulsar una investigación penal, la revisión posterior a la acción examinará si algún empleado en activo incurrió en una irregularidad que amerite medidas disciplinarias. La división no puede recomendar que se discipline a exempleados.
Flynn se declaró culpable de mentirle al FBI sobre las conversaciones con el embajador ruso durante el periodo de transición presidencial, aunque el Departamento de Justicia dijo que en su propia revisión del caso se determinó que no había bases suficientes para que los agentes hubieran entrevistado a Flynn en primer lugar, y que por lo tanto cualquier declaración que les hizo era irrelevante para la investigación subyacente sobre los vínculos entre Rusia y el equipo de campaña de Trump.
La solicitud del Departamento de desechar el caso está pendiente de resolución ante un juez federal, que no ha indicado si la concederá.
El FBI dijo que, además de su revisión interna, ha cooperado con otras investigaciones solicitadas por el secretario de Justicia William Barr, incluyendo las pesquisas sobre el caso de Flynn y los orígenes de la pesquisa sobre Rusia.